No tienen valores aquellos que no son capaces de respetar a los de los demás. Tú no crees, y menos defiendes la libertad, cuando no respeta la del otro. Los que defienden y los que gritan y abuchean los signos de los otros imponen su fuerza, son dictadores, porque la libertad es otra cosa. Se gana en los parlamentos, con la verdad y el respeto.
En otros tiempos impondrían la fuerza violenta, la ley del más fuerte, pero con el tiempo algo se aprende y ahora saben que por la fuerza no se consigue nada, y que la violencia engendra violencia. Sin embargo, cansados de sus sin razones empiezan a imponer su ley en todos los acontecimientos de masa que se les presentan, saltándose a la torera todo respeto y valores democráticos.
¿Cómo se puede hablar de expresión de libertad cuando tú no respetas la libertad del otro? ¿Cómo tienes la desfachatez de gritar, quemar símbolos, pisotear y romper lo que representa para otros su símbolo de unidad y de patria, para imponer lo que tú crees los tuyos sin razones que lo justifiquen? Sólo una cosa lo explica, que no lo justifica, y es la ambición personal, la soberbia, la ideología imperante y dictadora, la avaricia de poder e individualidad que sólo tiene un camino al que conduce irremediablemente, la perdición.
Discernir todos estos acontecimientos nos lleva, a todos aquellos que buscan la verdad, la paz y la buena convivencia en armonía y unidad, a meditar muy seriamente nuestro voto para establecer una plataforma fuerte y estable que pueda reconducir todo este caos donde estamos metidos. Es verdad que no faltarán aquellos que, apoyados en la corrupción de los que están, revuelvan más el cotarro, pero tendrán que darse cuenta que los que vienen y prometen traen peores intenciones.
Será siempre mejor unirnos en un frente común y luego empezar a limpiar toda la basura acumulada, hasta despejar el horizonte y poder escoger en libertad lo que más conviene para los intereses de España. Interese que pasan por establecer lo valores de unidad, justicia, libertad, verdad, defensa de la vida y la familia y paz.
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